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La OEA finalizó anoche en Cochabamba (Bolivia) su 42 Asamblea General, en la que el tema central, la seguridad alimentaria, terminó desplazado por los pedidos de reformas al organismo y las críticas de Ecuador, Bolivia y Venezuela a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).  

Aunque este foro de cancilleres fue anunciado como la oportunidad para que los Gobiernos de América, salvo Cuba, estudiaran la situación de 53 millones de personas que sufren hambre en el continente, el asunto pasó a un segundo plano durante los tres días que duró la Asamblea, para dar paso a temas como la reforma de la Organización de Estados Americanos (OEA).  

 OEA "acoge" cambios de DD.HH .-  La  OEA decidió ayer "acoger" el polémico informe de reformas del sistema interamericano de derechos humanos, impulsado por Venezuela y Ecuador, pero dio a sus autores seis meses para discutir su aplicación con las partes involucradas.   Tras horas de discusión sin consenso, la Asamblea aprobó una resolución de un grupo de países encabezado por México para "acoger" el informe sobre las reformas y encargar al Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) que formule propuestas para su aplicación, "en diálogo con todas las partes involucradas".

   "En el plazo de seis meses o a más tardar en el primer trimestres del 2013, dichas propuestas se pondrán a consideración de una asamblea general extraordinaria", apuntó el ministro boliviano de Exteriores, David Choquehuanca.

Las criticas.-  El presidente anfitrión Evo Morales y Correa han dicho que la OEA debe cambiar para dejar de servir al "imperio" (una referencia a Estados Unidos), o "desaparecer".Venezuela y Nicaragua se sumaron a las críticas. La resolución aprobada encomienda al Consejo Permanente a formular un plan de aplicación de las reformas propuestas por un grupo de trabajo y buscar consenso con todas las partes, incluyendo a las organizaciones de la sociedad civil.

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Sobre el hambre

Sobre la seguridad alimentaria, que había sido elegido como tema central de la OEA, los ministros  coincidieron  en que acabar con el hambre asegurará el desarrollo en un continente donde aún 53 millones de personas padecen hambre.   Al respecto, el canciller de Argentina, Héctor Timerman, afirmó que las mayores causas del hambre son la desigual distribución de los ingresos.

Miembros de la Organización de los Estados Americanos (OEA) en la segunda sesión plenaria, ayer aprobaron por unanimidad la Carta Social de las Américas, documento que entre sus principales aspectos busca luchar contra la pobreza y desigualdad social en el hemisferio promoviendo los Derechos Humanos.

En el marco del segundo día de la reunión de la OEA que se desarrolla en los ambientes del hotel Regina de Tiquipaya, los cancilleres de los países que conforman el organismo internacional, aprobaron la denominada Carta Social de las Américas, uno de los principales documentos que se abordó en el encuentro que contó con el respaldo general de los Ministros de Relaciones Exteriores.

En su condición de Presidente de la 42 Asamblea General de la OEA, el canciller boliviano David Choquehuanca, destacó que el documento se haya aprobado por unanimidad y cuente con el respaldo pleno de todos los miembros quienes coinciden la urgente necesidad de asumir políticas de lucha contra la pobreza y la desigualdad social.

Al respecto, el canciller de Costa Rica, Enrique Castillo, dijo que "la persona, por el solo hecho de serlo, merece respeto y es la razón de ser de la democracia en América", celebrando la aprobación del documento considerado de suma importancia en este hemisferio, donde la mayoría de las poblaciones aún viven en situaciones de pobreza y en muchos casos pobreza extrema.

Por su parte, el canciller de Argentina, Héctor Marcos, sostuvo citó "reconocemos el esfuerzo de las delegaciones en las negociaciones de la Carta Social sosteniendo la filosofía general del instrumento como pilar fundamental de la actuación de la OEA en materia de desarrollo económico y social y como un complemento necesario de la Carta Democrática Interamericana que reconoce que el desarrollo económico y social son interdependientes y se refuerzan mutuamente".

Durante la toma de la foto oficial del encuentro de cancilleres, el secretario General de la OEA, José Miguel Insulza, entregó la Carta Social aprobada al presidente del Estado, Evo Morales, quien manifestó su complacencia por el apoyo de los países que respaldan plenamente el acuerdo suscrito.

DATOS

- La OEA a la fecha cuenta con una Carta Constitutiva y la Carta Democrática Interamericana (adoptada en 2001) que trata principalmente los asuntos políticos, define la democracia y precisa cómo debe ser defendida cuando enfrenta amenazas. Ahora se espera que agregue la Carta Social, como un complemento a los compromisos que han suscrito los países desde la creación de la OEA en 1948.

- La Carta Social, que ahora cuenta con el consenso de los estados miembros, parte del reconocimiento de que "los pueblos de América tienen legítima aspiración a la justicia social y sus gobiernos la responsabilidad de promoverla. El desarrollo con equidad fortalece y consolida la democracia, en tanto son interdependientes y se refuerzan mutuamente".

La 42 Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) aprobó hoy la Declaración de Cochabamba con el postulado de "seguridad alimentaria con soberanía", en medio de cuestionamientos de Chile, apoyado por Estados Unidos, que objetó la palabra "soberanía".

Diego Pari, embajador boliviano ante la OEA, explicó que Chile logró que se incluya en el documento una nota de pie de página en el que observa la palabra "soberanía".

Pari agregó que, en líneas generales, se consiguió el respaldo mayoritario de los cancilleres de los países miembros de la OEA asistentes a la declaración, que será en adelante motivo de debate y resoluciones a favor de esta postura propuesta por Bolivia.

En el epílogo de este foro internacional, que se desarrolla en la población de Tiquipaya, en el departamento de Cochabamba (centro), los cancilleres de los países miembros de la OEA debatieron sobre alimentación, democracia y reformas en el organismo continental, entre otros temas que serán incluidos en la declaración final.

"Chile se opuso al tema de soberanía alimentaria y ha establecido un pie de página. Creemos que es una oposición algo encubierta, pero se obtuvo el respaldo de varios países que ven a este término como una amenaza, más que la dignidad para los pueblos", dijo el diplomático boliviano.

Las negociaciones de la Comisión General determinaron aprobar la declaración con 42 párrafos, para dejar constituido un tema que será tratado en los próximos años en la OEA y también en los organismos especializados.

Se destacan los artículos que hacen relación a seguridad y soberanía alimentaria y derecho a la alimentación, como elementos que fortalecen la posición planteada por Bolivia en momentos de crisis energética, de comida y financiera.

"Un pueblo sin alimentación está destinado a morir, creemos que la alimentación es una cuestión de vida, y por eso Bolivia es un país defensor de la vida", enfatizó Pari.

El postulado de Bolivia fue el punto más debatido por los cancilleres entre lunes y martes, en el encuentro hemisférico que reúne a diplomáticos de los 34 países miembros de la OEA. Los trabajos iniciaron el domingo pasado y concluyen este martes.

"Muchos países expresaron su preocupación por el tema del título. Tuvimos el apoyo necesario para mantener el título, como Bolivia, como lo había planteado, 'Seguridad alimentaria con soberanía'", sostuvo el canciller boliviano.

Según la explicación de Pari, la "seguridad alimentaria" es un concepto que está enfocado a reducir el hambre y la pobreza en la región, pero la cuestión de "soberanía" pretende garantizar, en primera instancia, la producción de alimentos en un continente con calidad y de abastecimiento interno, para luego el excedente exportarlo.

En su intervención en la tercera sesión plenaria de la Asamblea de la OEA, el canciller chileno Alfredo Moreno objetó el tema de "Seguridad alimentaria con soberanía".

"Nos parece prudente tener presente el riesgo de que ir más allá del concepto de 'seguridad alimentaria' podría ser contraproducente para nuestra economía si avanzara sobre aspectos que lesionen la libertad de los mercados y reduzcan oportunidades", argumentó el jefe de la diplomacia del gobierno de Sebastián Piñera

Un foro debate vinculado a espacios de reflexión para que las posiciones de los gobiernos tengan mayor participación de especialistas y la población en temas medioambientales, con vistas a la Cumbre de Río + 20, sesionó hoy en esta capital.

Aunque el asunto central es la seguridad alimentaria, la crítica del ALBA y Brasil al Sistema Interamericano de Derechos Humanos se perfilaba como el espinoso protagonista por las posturas divididas de los países. 

La Organización de Estados Americanos (OEA), el más antiguo entre decenas de mecanismos regionales, comenzó la 42 Asamblea General con notables ausencias, incluida la secretaria de Estado de los EEUU, Hillary Clinton, y parte de los cancilleres latinoamericanos. En la lista de asistentes confirmados hasta ahora hay viceministros, subsecretarios e, incluso, diplomáticos de menor rango, aunque para equilibrarlo, el presidente anfitrión, Evo Morales, invitó a última hora a su par y correligionario ecuatoriano Rafael Correa, que aceptó casi de inmediato.

Representantes de 34 países americanos, todos menos Cuba, que no quiere volver a la OEA tras décadas de exclusión, estudiarán hasta el martes una propuesta boliviana sobre "seguridad alimentaria con soberanía", concepto genérico que todos aceptan, aunque con diferentes significados.

"Ahí tenemos diferencias con algunos estados, como los Estados Unidos. Por supuesto vamos a tener diferencias", adelantó Morales el sábado en una entrega de obras públicas, su principal afán de cara a su reelección en 2014 para un tercer período.

Tampoco apoyarán los Estados Unidos ni otros países el empeño de Morales, hasta ahora estéril, de que la comunidad internacional "reconozca" el masticado de la coca, materia prima de la cocaína, que de nuevo trata de incluir en el documento de Cochabamba.

Hay, además, grandes diferencias sobre intentos de reformar los mecanismos de la OEA defensores de los derechos humanos y la libertad de prensa, promovidos por mandatarios como Correa o el venezolano Hugo Chávez, que han sido criticados en esa instancia.Correa ya avisó que acepta la inédita invitación de Morales a una reunión ministerial para "poner en su sitio a cierta burocracia internacional".

Sin alimentos 

Sobre la desnutrición, el proyecto de declaración recuerda que hay 53 millones de americanos que padecen hambre crónica, casi uno de cada diez, pero no se incluyen planes concretos para resolverlo.

La mayoría de los párrafos del documento han aparecido ya antes, sin resultados tangibles, en decenas de declaraciones de las últimas décadas de los innumerables organismos regionales que proliferan en la sopa de siglas de la integración americana.

El proyecto acepta -tampoco es novedad- que hay grandes diferencias en el continente sobre alimentación, pues algunos países han reducido el hambre y la desnutrición, mientras otros aún tienen grandes sectores vulnerables.

Entre los peores casos está precisamente Bolivia, según la ONU, que ha expresado preocupación por la extrema pobreza y desnutrición de los bolivianos y, en particular, de los indígenas.

La representante de la ONU en La Paz, la japonesa Yoriko Yasukawa, dijo meses atrás que más de un tercio de los indígenas de Bolivia viven en la extrema pobreza y sin ingresos suficientes para alimentarse adecuadamente, y que un cuarto de la población, al margen de razas, sufre esa condición.

Los ministros de Exteriores, o sus representantes, discutirán asuntos más propios de sus colegas de Agricultura o Economía, como estímulos a políticas agrícolas, volatilidad de los precios de los víveres y ayudas a pequeños productores, que aportan el 60% de los alimentos básicos de América.

Sobre "soberanía alimentaria", Bolivia dice que es el "derecho de los pueblos a definir sus propias políticas y estrategias sustentables de producción, distribución y consumo de alimentos que garantizan el derecho a la alimentación para toda la población".

El secretario general de la OEA, el chileno José Miguel Insulza, ha reconocido que ese concepto ha causado "alguna discusión", porque su significado lo ven distinto unos y otros gobiernos.

Morales achacó la ausencia de Clinton a discrepancias sobre este tema central del foro, pero Washington asegura que no estará en Cochabamba porque está en una gira por siete países, programada antes de que se fijara para este mes la Asamblea de Cochabamba.

El anfitrión cree que las crisis alimentaria, energética, financiera y climática son consecuencia de "los desequilibrios y desigualdades" del "modelo de desarrollo que ha implementado la sociedad occidental", explicó su canciller, David Choquehuanca.

Las primeras resoluciones concertadas del proyecto de declaración anuncian generalidades y vaguedades como promover el desarrollo agrícola, fortalecer la seguridad alimentaria y el "compromiso con el objetivo de erradicar el hambre y la malnutrición".

 Además, promover el desarrollo agropecuario sustentable, proteger la biodiversidad y luchar contra la desertización y la sequía para expandir las áreas de cultivo, pero sin detallar cuánto se invertirá ni fijar objetivos precisos ni plazos.