En el departamento de Tarija se siguen utilizando agroquímicos que fueron cuestionados por organizaciones de salud y medio ambiente. Estos productos mayormente ingresan de contrabando, evadiendo las normativas de seguridad. El principal conflicto es la consecuencia en la salud de las personas que lo utilizan, en este caso los agricultores.
El cáncer es una enfermedad que puede derivar por el contacto extenso de químicos, y no es sorpresa que Tarija tenga uno de los índices más altos de personas con esta enfermedad en el país. Países europeos o El Salvador, como un ejemplo más cercano, prohibieron el uso de agroquímicos en los cultivos agrícolas.
El representante de la Cámara Minera de Tarija (Camita), Rodolfo Meyer, en su labor de cooperar con la organización de Lucha Contra el Cáncer, indicó que de los 12 químicos prohibidos en el convenio de Estocolmo, en la ciudad aún hay comercializadoras que ofrecen este tipo de productos. A través de un aviso a las 76 centrales campesinas de Cercado se entregó el nombre de los agroquímicos prohibidos para que no sean utilizados.
Los productores son los afectados directos al tener contacto con los agroquímicos que utilizan para matar plagas del cultivo. “Están trayendo algunos productos clandestinos con los nombres alterados. Senasag (Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria) está ayudando a realizar los controles necesarios”, expresó.
Cabe recordar que el convenio de Estocolmo sobre los Contaminantes Orgánicos Persistentes (COPs) es un acuerdo internacional que regula el tratamiento de las sustancias tóxicas. Fue firmado el 23 de mayo de 2001 en Estocolmo y entró en vigor el 17 de mayo de 2004.