fbpx
VISITA NUESTRO
NUEVO SITIO WEB

 

 

 

 

Posts @IPDRS

El Instituto para el Desarrollo Rural de Sudamérica, IPDRS, con el apoyo de Manos Unidas y en alianza con las Capitanías de Macharetí, Huacaya y Villamontes impulsa un proyecto de dos años sobre mercados y agenda económica de las mujeres en Macharetí, Huacaya y Villamontes.

El proyecto plantea contribuir a la consolidación de la gestión de territorios indígenas a partir de tres actividades principales: a) participación en el mercado de productos incrementando sus ingresos, b) agenda económica desde las mujeres de organizaciones sociales y económicas, y c) participación del sector indígena guaraní en la toma de decisiones sobre el desarrollo económico de sus territorios.

El tema de los mercados en este proyecto girará alrededor de las ferias, al respecto el coordinador del IPDRS, Oscar Bazoberry comparte una reflexión.

Mercados en tres territorios del Chaco, reflexiones de Oscar Bazoberry

Para poner en marcha iniciativas de desarrollo territorial es imprescindible considerar las características de la dinámica de los mercados locales. El énfasis de los estudios concluyen con dos recomendaciones: a) Una participación activa de los actores locales, como productores y como compradores, genera mejores condiciones de sostenibilidad y desarrollo de los territorios. b) un balance positivo y complementario con la economía de fuera del territorio.

Los territorios pueden crecer aceleradamente con economías de enclave, como son los proyectos extractivistas de diferente naturaleza, hidrocarburos, agricultura, campamentos para construcción de infraestructura, aprovechamiento forestal, minería. Sin embargo, estas economías no generan progreso a largo plazo, y en general concluyen en el deterioro del territorio y el abandono de pasivos ambientales, naturales y poblacionales.

Un crecimiento sostenido tiene considera un flujo de recursos, de inversiones, y de trabajo que garantice la prosperidad sostenida. Esto se logra con la participación de todos los actores en la economía, y lo más importante, un equilibrio razonable entre los sectores estables de la economía, esto es un sector de productores, un sector de servicios, un sector financiero, un sector de funcionarios públicos, etc.

Adicionalmente, desde la experiencia de los territorios indígenas, existe una problematización adicional. La condición estructural de su inserción al mercado, y la consecuencia social y cultural de su inserción.

Respecto a su condición estructural, en general la población de los territorios indígenas, dada su posición y posesión de recursos, ha participado de la economía a través del: venta circunstancial de mano de obra fuera del territorio; aprovechamiento, cuando no explotación, de los recursos naturales; por la afectación por terceros (compensación); y en casos extremos por transferencias públicas. Existen muy pocos casos en los que la población, a nivel de territorio, haya conseguido una actividad sustentable que compense las expectativas y necesidades crecientes de la población.

Respecto a la consecuencia social y cultural, los patrones de participación determinan en gran medida las dinámicas sociales y culturales. Y esto resulta muchas veces en un conflicto y desestructuración del propio territorio, o un cambio significativo en sus patrones sociales y culturales. Esto ocurre porque los cambios en los patrones como proveedores vendedores, también significa un cambio en los patrones de consumo. Vamos a abundar en esto, dado que es un tema demás de complejo.

Voy a poner dos ejemplos, que vi de cerca: uno es la venta de miel cosechada en el campo, o su intercambio por productos como el azúcar. Y la otra es el pago de servicios ambientales y el consumo de cerveza coca cola y otros con los recursos obtenidos. En ambos casos, es posible que no haya problemas en términos de balance económico, es decir que pueden ser situaciones aceptables, sin embargo, lo que normalmente ocurre es que estos intercambios se dan en situaciones de desigualdad e inequidad, por lo que suelen ser desventajosas y poco duraderas.

A esto hay que agregar, que el dinero genera conflicto, sobre todo por su distribución interna en el territorio, lo que ha llevado a muchos activistas y académicos, a rechazar el tema económico, sea por razones como la matriz civilizatoria, o la perversión de capitalismo.

De todas maneras, nuestras acciones están orientadas a la reflexión y acción en torno a las siguientes preguntas:

¿Cómo enfrentar el tema de mercado, el acceso a los mercados por la población indígena o los grupos que promueven una identidad particular, sin que este espacio constituya un factor predominante de desarticulación de la opción de sociedad y comunidad elegida por la propia población?

¿Cómo está cambiando el mercado en las nuevas condiciones de comunicación e información, tanto a nivel de información del producto, la conexión entre productores, los encargos a distancia, las transacciones electrónica, etc.?

¿Cómo superar las limitaciones que ya conocemos desde las organizaciones y las instituciones, la diversificación, la segmentación entre producción y comercio, el tema de la calidad, la presentación y el volumen?

Aproximaciones IPDRS- Macharetí

El proyecto tendrá como su principal punto de acción el Municipio de Macharetí. Desde el 2012 el IPDRS ha estado en diálogo con este territorio a través de actividades puntuales; pero de importante valor. Así, algunos líderes de Macharetí participaron en la investigación Chaco boliviano paraguaya. Desafíos en perspectiva transfronteriza; colaboró con CIPCA en la sistematización del Caso 50 de acceso a tierra Yembigusu, territorio guaraní de frontera; desarrolló un investigación sobre la gestión del agua; realizó actividades de formación como el encuentro de comunicadores, el curso virtual de autonomía indígena y el curso virtual de leyes de semillas en los países andinos; promovió la construcción de la página web de la Capitanía Zona Macharetí y sus redes sociales y recientemente publicó el libro: “Acceso a internet y ruralidd. El caso de Macharetí en Bolivia”.