Una comisión del Consejo Regional Indígena del Cauca, en representación de la Minga, recorre la ciudad de Bogotá.
Por la vida, el territorio, la democracia y la paz, la minga nacional, que inició su camino el pasado 10 de octubre en el Cauca y culminó su recorrido en la plaza de Bolivar con un juicio al ausente presidente de Colombia, Ivan Duque, continúa caminando la palabra en diferentes territorios del país.
En esta oportunidad, La Minga camina en Bogotá para mantener viva la esperanza, avanza para permitir un cambio estructural en las políticas que afectan actualmente a los colombianos.
Inicialmente, en diálogo con las organizaciones de base de los sectores populares de Soacha, la minga entrelazó acciones con los jóvenes de esta localidad para buscar fortalecer el mensaje de respeto a la vida y al territorio. Allí la consejeria y los delegados políticos del CRIC, agradecieron en nombre de la Minga, el apoyo y el caluroso recibimiento realizado por esta población a la caravana de mingueros en su ruta a la capital del país.
Igualmente, en su estadía, los delegados de la minga, recibieron a los universitarios en la casa de pensamiento del CRIC, ubicada en Bogotá, donde se conversó sobre las inquietudes que tiene este sector en el tema de educación pública; en este espacio los universitarios manifestaron sus falencias organizativas, ratificando también que estarán al tanto del llamado de La Minga, ya que la consideran una oportunidad para proyectar nuevos mecanismos de lucha y exigencia.
También, la comisión encabezada por el consejero Mayor del CRIC, y vocero de la Minga, Ferley Quintero, en diálogo claro, interlocutaron con instituciones como la alcaldía de Bogotá, quienes manifestaron su apoyo a varias acciones que fueron agendadas.
Finalmente, la comisión visitó a la comunidad internacional con el objetivo de socializar y visibilizar lo realizado por la Minga y sus objetivos.
De esta manera La Minga continúa caminando la palabra, extendiendo su voz de invitación a diferentes sectores e instituciones del orden nacional e internacional, para así, afianzar el mensaje de defensa de la vida, el territorio, la democracia y la paz.