El presidente de la Subcentral del territorio indígena Cayubaba, en el municipio de Exaltación, en Beni, Rody Chávez, dio a conocer que los tres casos positivos de coronavirus que se reportaron hasta este 3 de junio por el Ministerio de Salud corresponden a miembros del pueblo indígena.
“Lastimosamente (los enfermos) pertenecen a nuestra nación cayubaba; estamos con ellos, viendo cómo colaborarlos (…) Ellos viven aquí, pero por cuestiones familiares tuvieron que ir a Trinidad y vinieron infectados”, afirmó el representante indígena.
Con ello, suman 15 los contagios de COVID-19 entre los indígenas de las tierras bajas de Bolivia, según los datos recogidos por el Observatorio de Derechos de los Pueblos Indígenas de Bolivia (ODPIB), dependiente del Centro de Estudios Jurídicos e Investigación Social (Cejis).
De acuerdo con los datos oficiales que reportó el Ministerio de Salud, el 2 de junio se registraron los tres casos en el municipio de Exaltación, que se sobrepone a los territorios indígenas Cayubaba y Canichana. Sin embargo, en el reporte oficial no se dio cuenta de la identificación étnica por no haberse considerado esta variable en la ficha epidemiológica.
Chávez explicó que al momento los contagios solo se dieron en el área poblada del municipio y las personas infectadas no ingresaron al territorio indígena Cayubaba, donde las comunidades están aisladas.
“Somos 26 comunidades en el territorio y la mayoría de los habitantes están en el área dispersa; nuestra preocupación es que (la pandemia) vaya a propagarse más allá (del área urbana). Es necesario una atención más amplia dentro de nuestro territorio”, indicó la autoridad al ODPIB-Cejis.
“Somos un territorio extenso y es un poco difícil entrar en contacto, nuestras comunidades tienen acceso por Guayaramerín vía terrestre; entonces, es necesario que nos colaboren con equipamiento (para los centros de salud), medicamentos y todo lo que es para la asistencia de los hermanos del territorio Cayubaba”, explicó Chávez.
El territorio del pueblo indígena Cayubaba se encuentra entre los municipios de Exaltación y San Joaquín, en el departamento del Beni. Tiene 1.424 habitantes, según los datos del Censo Nacional de Población del 2012. Es considerado como un pueblo vulnerable debido a su exposición al etnocidio, el escaso acceso al servicio de salud y a los servicios básicos, así como a la decantación cultural y social de la que fueron objeto en la segunda mitad del siglo pasado.
De acuerdo con los datos recogidos por el ODPIB-Cejis desde los mismos territorios, a la fecha son 15 casos de contagio de COVID-19 entre los integrantes de pueblos indígenas; de ellos seis se encuentran los pueblos indígenas de Lomerío (Santa Cruz), entre en el pueblo Yuqui (Cochabamba) y tres entre los Cayubaba (Beni).