Productores familiares de los departamentos de Colonia y San José, en Uruguay, participarán en un proyecto para disminuir la degradación de suelos. El proyecto fue escrito por el ingeniero agrónomo Miguel Piñeyro y la veterinaria Lilian Arduin en julio de 2008. Fue aprobado por el Programa de Pequeñas Donaciones del Banco Mundial, dependiente del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo.
En diciembre del año pasado, les habilitaron 35 mil dólares para comenzar con su ejecución. En total son 10 familias beneficiarias.
La idea es producir compost con estiércol de gallinas y vacunos y sin el uso de productos químicos.
Entre todos construirán, de forma solidaria, los gallineros, que serán móviles y tendrán pisos de rejilla para que el estiércol se acumule en el suelo.
Piñeyro explicó que se trata de "cuidar y aplicar conocimiento y también redunda en el bolsillo del productor".
Las gallinas se alimentarán con los subproductos de las plantas de maquinación de semillas, que se desechan en los vertederos. Luego de una reunión con los productores, comenzará la etapa de armado de los gallineros.
El proyecto durará quince meses. Ese tiempo es el que asumieron las familias como compromiso.
Rosario Álvarez es una de las productoras participantes. Integra el grupo Maya que recibe asesoramiento técnico del proyecto Uruguay Rural, del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca. Álvarez vive en la zona de Pavón, departamento de San José, y tiene tambo. Produce queso, muzzarella y manteca. Afirma que tal vez la agricultura orgánica no sea tan rentable como la tradicional, pero el productor gana en salud y tranquilidad.
Al Grupo Maya lo integran ocho familias. Álvarez es la única que produce sin utilizar productos químicos.