Alianzas por la tierra y territorio: resistir es proponer
Colectivo Territorios en Resistencia
El Movimiento Regional por la Tierra y Territorio, iniciativa del Instituto para el Desarrollo Rural de Sudamérica (IPDRS), presenta la entrevista realizada a los y las compañeros y compañeras del colectivo Territorios en Resistencia (TR). Éste es un colectivo autogestionario en Bolivia que acompaña diversas experiencias de resistencia territorial y que demuestra que jóvenes y mujeres asumen como búsquedas y luchas personales aquellas causas que tienen que ver con el territorio. El diálogo de los colectivos urbanos y los pueblos indígenas en toda Sudamérica resultan en movilizaciones y alianzas contemporáneas que cuestionan el extractivismo y la forma de vida basada en el mercado, y a la vez apuestan por formas alternativas, de comunicación, relacionamiento y vida.
Las personas que forman parte del colectivo TR fueron los encargados de la sistematización del Caso 90: “Tipnis: defendiendo nuestra casa grande”, desde Bolivia, para el Movimiento Regional por la Tierra y Territorio
¿Cómo se articula y organiza Territorios en Resistencia? ¿A qué temas y acciones abocan su trabajo?
Somos una red solidaria de corazón anticapitalista, “corazón” porque sentir debe ser el primer compromiso. Somos un colectivo en proceso de aprendizaje, respetuosos y respetuosas de las luchas y formas de lucha de los pueblos y, en general, de otras colectividades; luchas que acompañamos en la medida que podamos ser útiles para amplificar las voces de denuncia y sumar solidaridades.
TR se organiza a través de la red virtual pues es la tecnología la que nos permite mantener principios de autonomía, independencia y libertad de acción. Estamos en redes sociales y tenemos una página web, en las que ejercitamos la “contrainformación” (refutar el discurso oficial del poder estatal).
TR es un grupo de afinidad con intereses comunes que opera de manera descentralizada, pero coordinada, en sus actividades comunicacionales y de participación en activismo/investigación ecologista. Respetamos la diversidad y autonomía de cada uno de los integrantes. A veces coordinamos acciones conjuntas o nos sumamos a las iniciativas individuales de alguien del grupo.
Hoy lo más importante es defender la autonomía, territorial, virtual, simbólica, cotidiana, personal, frente al proceso de legitimización estatal autoritaria y totalmente anti indígena y extractivista. TR es lo que nos une, somos autónomos, tenemos dominio de nosotros mismos/nosotras mismas y de nuestras acciones.
¿Cuáles son los principales territorios en resistencia en Bolivia? ¿Cuáles los motivos de su resistencia?
Creo que los conceptos de resistencia y territorio se han hecho más complejos en la realidad boliviana, y tienen que ver con luchas por resistir y defenderse de los embates del despojo del capitalismo encarnado en la política extractivista del actual gobierno.
Podría mencionar como principales, a las luchas de los pueblos indígenas para defender sus espacios y lo que vive y se crea ahí, es decir, ejercer su derecho a la autodeterminación como naciones, ahora reducidas por el gobierno a grupos de comunidades fragmentadas. Los pueblos indígenas deben encontrar formas de sostener sus espacios de forma autónoma, con valores de autogestión y dignidad social. Algunos casos podrían ser la lucha del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Secure (TIPNIS) a la invasión y neocolonización de su territorio, a través de la carretera Villa Tunari – Isiboro Sécure, la oportuna defensa de las comunidades de Mallku Qota en Potosí para expulsar a una transnacional minera canadiense, las comunidades de Takovo Mora en Santa Cruz para exigir información y consulta previa a la exploración petrolera, entre otros casos.
Estos casos son importantes pues sostienen su trinchera pese al continuo peligro de despojo. Debemos recuperar el legado de la “guerra del agua”, “guerra del gas”, entre otras luchas contemporáneas, para mostrar que además de los pueblos indígenas, las ciudades y el campo también son escenarios de resistencia, así como los espacios de las mujeres para refutar al estado patriarcal. La confluencia de todas y todos estos sujetos en algunos momentos de alta represión del Estado muestra la capacidad de solidaridad en Bolivia, que también es una expresión de la resistencia.
¿Qué representa el TIPNIS para este momento histórico?¿Cuál creen que es la utilidad de identificar y visibilizar la vitalidad de estos casos, de la cotidianidad en estos territorios, cómo articularlos?
El TIPNIS, punto de quiebre en el gobierno de Evo Morales, desenmascaró toda la retórica sobre la defensa de la Pachamama; los indígenas, sus largos 500 años de lucha y derechos, la plurinacionalidad; el capitalismo con todas sus sucias y extractivas formas; el discurso sobre el "vivir bien", impulsando un desarrollismo y progreso civilizatorio neoliberal y colonizador; el repudio del pueblo hacia impostores con doble moral; prácticas fascistoides en manejo de protestas sociales como desarticulación o cooptación, reduciéndolas solo a sus adherentes; endiosamiento y culto al líder indiscutible y único. El TIPNIS representa la lucha de los pueblos por su autodeterminación, el cuidado de la Madre Tierra (su Casa Grande) y...no olvidemos los beneficios ambientales (agua), que prestan todos los parques y áreas protegidas, cosa que a nuestro presidente parece no importarle.
Es necesario visibilizar esta experiencia porque, es la única lucha que frenó la soberbia del "sí o si, se hará la carretera", "quieran o no quieran los indígenas", dependerá como ellos se articulen para seguir su lucha, desde su cotidianidad continúan su pacífico y autónomo modo de vida.
¿Por qué los jóvenes y la sociedad en general deben prestar atención a los territorios indígenas? ¿Cómo romper estas distancias entre lo urbano y lo rural?
La pregunta más bien es dónde termina y dónde comienza un territorio indígena, más allá de la formalidad de las declaraciones legales, desde nuestra mirada el actual territorio boliviano y su división política se han sobrepuesto a territorio indígena originario. Hoy los indígenas del TIPNIS están en La Paz en Coroico, en Santa Cruz, en Cochabamba, así como los aymaras y quechuas, estamos y vivimos por todo lado. Por ello, debemos buscar es una reapropiación del territorio desde donde estamos, es realmente sacar la colonialidad de la mente y el corazón.
Lo que ha ocurrido con la marcha y luego de ella, es abrir estos territorios a todos y todas, las y los jóvenes han sentido una conexión inmediata porque debe ser parte de nuestra historia el sentirnos unidos por la defensa de la vida. No debemos ver “el territorio indígena” como si fuera externo, un gueto, exclusivo, sino como nuestro territorio, al que pertenecemos y del que dependemos y por lo tanto debemos defender e interactuar.
¿Cuál creen que es la utilidad de identificar y visibilizar la vitalidad de estos casos, de la cotidianidad en estos territorios, cómo articularlos?
La desesperanza es el peor enemigo de la lucha, el creer que estamos solos, que no podemos nada, que sólo a nosotros nos pasa, el plus de este trabajo es poder compartir las historias desde los propios actores, hacerles recuerdo de su protagonismo y en muchos casos como en este concreto, ver que los y las protagonistas son mucho más que solamente las personas que viven en el territorio, que ha habido una apropiación del territorio mucho más fuerte desde gente que vive en la ciudades. Mostrarse, recordar, encontrarse hace que los pueblos se reconforten y sigan tejiendo redes de resistencia.
Entrevista realizada por: Ruth Bautista Durán
*Las opiniones expresadas en este documento son responsabilidad del autor y no comprometen la opinión y posición del IPDRS.