Unos 35 civiles armados con escopetas y picanas eléctricas atacaron a mujeres y niños de la comunidad indígena Loma Piro’y, perteneciente al Pueblo Mby’a Guaraní, ubicada en Raúl Arsenio Oviedo, Departamento de Caaguazú. Los matones fueron contratados por sojeros que se habrían apoderado del territorio que reclama la comunidad, destruyeron y quemaron las casas y pertenencias de las familias indígenas.
Según denunció la referente de la comunidad, Elida Prieto, los civiles armados actuaron con extrema violencia y destruyeron todo a su paso, los mismos no contaban con ninguna orden judicial para desalojar a los indígenas, sin embargo se encontraban, presuntamente, acompañados por el intendente de la localidad Eddy Neufeld Hildebrand, del Partido Patria Querida, además de dos colonos brasileños que serían quienes se apoderaron de las tierras. En dicho territorio se encuentran asentadas unas 20 familias indígenas.
La líder de la comunidad señaló que quedaron absolutamente desamparados ya que todas sus pertenencias y alimentos fueron destruidos y quemados, además indicó que las autoridades nada hacen para protegerlos y garantizar el territorio de la comunidad por más de que la misma se encuentra reconocida por el propio Instituto Paraguayo del Indígena.
El hecho fue también denunciado por la Organización Nacional de Aborígenes Independientes (ONAI) que señaló que estos despojos constituyen una violación de los Derechos Humanos de los Pueblos Indígenas y que cuentan con la mirada cómplice del Gobierno de Mario Abdo Benítez. La organización llamó a las comunidades y organizaciones indígenas a unirse y luchar por la recuperación del territorio indígena.