Los precios del café alcanzaron sus cotas más altas en los recientes meses, incremento atribuido a los fenómenos climáticos en Brasil y Vietnam, principales productores y exportadores mundiales del aromático. El cultivo de café arábiga, uno de los más consumidos en el mundo, podría verse muy afectado por el incremento de la temperatura asociado al cambio climático.
El café es la segunda mercancía comercializada en el mundo, después del petróleo. Se estima en 125 millones el número de personas que viven de cultivarlo, incluyendo 25 millones de pequeños productores. La producción en el orbe supera la 100 millones de bolsas desde hace varios años, en una industria que mueve alrededor de 70 mil millones de dólares anualmente.
Esta semana, la variedad arábica, que constituye tres cuartas partes de la producción brasileña, se pagó en Nueva York a 137,95 centavos de dólar la libra -récord desde mayo de 2013-, mientras la variedad robusta, de menor calidad, se cotizó a 1,905 dólares la tonelada en Londres, precio máximo en seis meses. El coste del arábica aumentó 23% en una semana y 36% desde noviembre pasado, cuando alcanzó su precio más bajo en siete años (100,95 centavos de dólar la libra).
El fuerte aumento de los importes se debe a uno de los veranos (austral) más calurosos y secos en Brasil, donde algunas partes del país registraron las lluvias más escasas desde 1940, dijo el director de investigación de materias primas alimentarias en Ecobank Edward George.
Hasta ahora, la mayoría de los actores del mercado eran pesimistas sobre el rumbo del precio del arábica, que ya cayó 36% en 2012 y 24% en 2013, a causa de una oferta abundante y una menor demanda. En septiembre del año pasado la cotización de la variedad robusta descendió a su precio más bajo en dos años al ubicarse en 1.656 dólares la tonelada en el mercado de Londres, mientras que el arábica, negociado en Nueva York, cayó a su cotización más baja en casi un lustro.
Según reportes especializados y analistas de mercado, la cosecha de 2013 fue significativa en Brasil, Colombia y Vietnam. En el caso del gigante sudamericano, primer exportador mundial de café con 25% de las ventas en 2012, se esperaba para 2013 alrededor de 47,54 millones de sacos de 60 kilos, frente a los 50,83 millones precedentes.
Mientras, el crecimiento económico en los principales países consumidores fue frágil, lo que pesó en la demanda, particularmente de la variedad arábica. El consumo en Europa, por ejemplo, aún es inferior en 10% a su máximo alcanzado en 2010, y no aumentó el año pasado en Estados Unidos, primer consumidor del orbe.
Prevén menor producción global en 2013/14
Las exportaciones mundiales de café decrecieron a 9,61 millones de bolsas de 60 kilogramos en marzo de 2013, el 4% menos a las de idéntico mes de 2012, informó la Organización Internacional del Café. Sin embargo, para la primera mitad del período 2012-2013, con inicio el 1 de octubre de 2012, las exportaciones del producto crecieron 7% hasta colocarse en 56,1 millones de bolsas.
En junio del año pasado el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) estimó que la producción mundial de café llegará a 146,3 millones de sacos de 60 kilogramos en 2013/14, un 3% menos que el año precedente. Con anterioridad el USDAD había pronosticado una producción para ese período de 150,7 millones de unidades.
La USDA argumentó el recorte de su proyección en América Central y México como resultado de una vigorosa plaga del hongo de la roya en los cafetales. Durante la cosecha 2012-2013, la plaga de la roya dejó sin trabajo a más de 437 mil personas en la región centroamericana, estimó la viceministra de Agricultura y Ganadería de Costa Rica Xinia Chavez, en declaraciones al periódico La Prensa Libre. (1)
La USDA también atribuyó el declive a que Brasil, mayor productor mundial del grano, ingresó al año de menor rendimiento en el ciclo bienal. El volumen productivo del grano en el país sudamericano alcanzaría 53,7 millones de sacos en 2013/14, para una merma de 2,4 millones de unidades en relación con el resultado de año previo.
El USDA dijo, además, que Vietnam, el mayor productor de café variedad robusta, cosecharía unos 24,8 millones de sacos, frente a los 24,9 millones de 2012/13, debido a problemas relacionados con el clima. En abril del año pasado, la Asociación del grano y el cacao de Vietnam (Vicofa) pronosticó que la sequía que asolaba regiones del país se hará sentir también en el café, con una subida del precio, tras un previsible decrecimiento de la producción.
En los altiplanos centrales vietnamitas, donde se encuentran principales plantaciones, 55 mil de sus 500 mil hectáreas sembradas sufrían los efectos de meses de inadecuado régimen de lluvias. Vicofa calculó que se producirá un 30% menos, una proporción considerable para un país que se colocó en el puesto mundial número uno en el rubro, desplazando a Brasil de su tradicional primacía. (2)
El cultivo de café arábiga, uno de los más consumidos en el mundo, podría verse muy afectado por el incremento de la temperatura asociado al cambio climático, advirtieron investigadores etíopes y del centro botánico de Londres. Etiopía y Sudán, grandes productores del grano, perderían entre el 65 y el 100% de las tierras aptas para su cultivo, indica el estudio, primero en analizar específicamente el potencial impacto del calentamiento global en la producción de café.
El peor escenario es que la variedad arábiga salvaje podría estar en extinción para 2080. Esto debería poner en alerta a los responsables políticos acerca de la fragilidad de la especie, declaró el investigador del Real Jardín Botánico de Kew Gardens Justin Moat.
Las variedades de arábiga empleadas en las plantaciones en todo el mundo provienen de un stock genético muy limitado, que carece de la flexibilidad requerida para hacer frente al cambio climático y a otras amenazas, como los pesticidas o las enfermedades, explicarons los autores del informe.
Aún cuando no todas las personas están de acuerdo con la investigación, hay quienes aseguran que la variedad seguirá siendo plantada y cosechada, la realidad es que el café arábiga se muestra como una especie muy sensible climáticamente. La conclusión lógica es que la producción de arábiga está fuertemente influida por el aceleramiento del cambio climático, y que, en la mayoría de los casos el impacto será negativo para la industria del café.
Notas:
1. El hongo de la roya, científicamente denominado Hemileia vastatrix, se presenta como un polvillo color anaranjado en el envés de las hojas del cafeto, que caen prematuramente, al igual que el fruto, sin lograr su maduración. La infección que genera debilita los cafetos, disminuye su producción y puede ser letal para las plantas si se combina con el ataque de insectos, deficiente atención e insuficiente fertilización. Hasta marzo del año pasado, el brote del hongo destruyó al menos 1,7 millones de quintales de café (sacos de 100 libras) en Nicaragua, Honduras y El Salvador.
En Honduras, la roya dejó sin empleo a unas 100 mil personas, aseguró el Instituto Hondureño del Café (Ihcafé) y precisó que debido a esa plaga la producción cayó de 7,2 millones a seis millones de quintales, o sea, disminuyó en 1,2 millones de sacos (más de 60.962 toneladas). A los efectos de la roya se sumó el de la broca y ambas plagas, sumadas a los bajos precios del grano en el mercado internacional, causaron pérdidas al país por unos 600 millones de dólares. La broca del café es un insecto oriundo de África denominado científicamente Hypothenemus hampei. Perfora los frutos en su maduración lo que causa su caída, disminuye su peso y rendimiento y deteriora la calidad del producto procesado.
2. Vicofa citó en sus proyecciones a la provincia de Dak Lak, donde llovió un 30% menos que en 2012 y registró en 2013 un 70% de carencia de agua para los cafetos. Por estas circunstancias naturales el precio de la tonelada de grano ascendió en la primera mitad de marzo de 2013, de 1.800 dólares a 2.200 en cuestión de 10 días.