fbpx
VISITA NUESTRO
NUEVO SITIO WEB

 

 

 

 

Posts @IPDRS

 

Los productores campesinos han demostrado que las decisiones que toman para manejar sus sistemas de producción, se basan siempre en la sabiduría de cuidar cada uno de los elementos de la naturaleza, para lograr su interacción y el beneficio tanto a los miembros de su familia como para el medio ambiente. La especialista en planificación de proyectos de desarrollo rural, Liseth Barriga, establece que este rol de cuidado del medio ambiente inicia desde el núcleo familiar de los agricultores hasta su entorno comunitario.

En el Día Internacional de la Tierra, a nivel mundial, se destaca cada año la importancia de su preservación y la conciencia sobre los problemas que afectan al planeta.

Si bien los daños que se generan anualmente se van incrementando, Barriga destaca que son los productores campesinos los más comprometidos en llevar adelante  sistemas de producción respetuosos con la naturaleza, lo que también desemboca como un efecto domino en la generación de mayor conciencia para el cuidado de la Tierra.

“Esto se visibiliza en la práctica cotidiana de comprar alimentos, espacio en el que intercambian ideas sobre cómo sus prácticas agrícolas están brindando un alimento sano sin uso de productos químicos que atentan el entorno”, agrega la especialista.

Respecto a los desafíos que enfrenta la producción campesina indígena  de alimentos en concordancia con el cuidado de la Tierra, Barriga afirma que aún son muy grandes, y, “no solo, corresponde este camino a los productores campesinos sino a los ciudadanos y demás actores públicos”.

A pesar de los avances que se ha logrado en apoyar a las iniciativas emergentes como la producción agroecológica, mercados con raíces familiares, étnicas y culturales, entre otras. “No cabe duda, que las políticas públicas aún siguen apoyando, facilitando el desarrollo de un modelo agrícola industrializado. A pesar de que, dicho modelo continúa en su esfuerzo por alimentar a la población que crece vertiginosamente, aún existen problemas de desnutrición, hambre, así, como de sobrepeso y sumado a esto el deterioro de los recursos naturales”, recalca la especialista ecuatoriana.

Es entonces, asegura,  el momento de reconsiderar la generación de políticas e instrumentos que potencialicen otras formas de producción, de comercialización y cuyo principio sea el cuidado de la naturaleza.